Cuidado de los pies

Nuestros pies nos transportan de un lado al otro y son una de las partes del cuerpo a que menos atención prestamos. A menudo, usamos tacones demasiado altos, hormas muy estrechas o puntas excesivamente afiladas que nos pueden provocar lesiones irreparables.

El momento idóneo para comprar calzado y probárselo es la última hora de la tarde, pues nuestros pies están cansados y hasta puede que hinchados. Por ello, podremos adquirir zapatos que no nos aprieten. Conviene probarse los dos zapatos, ya que es posible que un pie sea más grande que el otro.

MASAJES, CORTE DE UÑAS, HIGIENE Y EL USO DE ZAPATOS ADECUADOS ENTRE LOS CUIDADOS DE LOS PIES

Para que funcionen bien y cumplan su pesada misión de cargarte todo el día dales atención especial por lo menos un ratito antes de acostarte.

- Con un leve masaje, examina tus pies todos los días y observa si tienes alguna llaga, ampolla, magulladura o hundimiento de la piel, callos, cambios de coloración o de temperatura o fíjate si la forma de tus pies, uñas o dedos han cambiado.

- Checa bien la planta de tus pies y observa que no tenga manchas, ampollas, callos o se esté despellejando .

- Es importante lavar bien los pies, diariamente con un jabón suave y de preferencia agua tibia. Sécalos muy bien, sobre todo entre los dedos y utiliza talco si te sudan mucho.

- Corta tus uñas en línea recta y si observas en ellas manchas, color amarillento o fracturas, consulta con un médico podólogo, para descartar la presencia de hongos. Si necesitas emparejarlas hazlo de forma pareja y con una lima de uñas.

- Si tienes callos u ojos de pescado, humedece los pies en agua tibia, utilice productos para quitarlos o acuda con un especialista. Las durezas puedes limarlas con cuidado con piedra pómez. Nunca utilices tijeras o navajas.

- Usa zapatos cómodos y cuando sean de tacón alto o punta estrecha, no los uses todo el día.

- Utiliza calcetines limpios, de algodón o lana, que no tengan figuras, parches o zurcidos que ocasionen roces. No debes utilizar ligas o bandas elásticas en las medias que ocasionen una deficiente circulación.

Cuando tomes sol, protege la parte superior de los pies con un buen bloqueador

importante saber que los pies soportan todo el peso del cuerpo. Ellos se encargan de coordinar los movimientos, el equilibrio y la maniobrabilidad. Dado que están más alejados del corazón, el suministro de sangre es más lento. Tienen 26 huesos, 32 articulaciones, 19 músculos y más de cien ligamentos. De ellos depende, en gran manera, la salud de nuestras piernas y columna vertebral. Mantener el peso, hace que sea menor la presión sobre los huesos y músculos de los pies. Si no les prestamos la debida atención es posible que tengamos problemas más graves que un simple dolor de pies.

Tengamos en cuenta que una pobre higiene o la falta de cuidados pueden causar problemas de músculos, huesos, piel, hongos, virus, bacterias, así como malestar en las piernas, espalda, fatiga...

CONSEJOS GENERALES

 Para descongestionar los pies del cansancio diario:

Bañarlos cada noche con agua tibia a la que se habrá añadido un puñado de sales de baño, o sal común. Descansar unos minutos con los pies en alto.

Sumergirlos alternativamente en agua caliente y fría.

Un masaje con una crema hidratante después del baño de pies, es calmante y drenante.

» Siempre que sea posible procurar caminar descalzos.

» Andar de puntillas.

» Mover los dedos, intentar coger objetos con ellos, hacer rodar una pelota de tenis.

» Hacer rotaciones de tobillo.

» Durante el día aprovechar cualquier ocasión para descalzarlos y mantenerlos unos minutos en alto.

» Una vez a la semana aplicar tras el baño o ducha una crema suavizante o aceite corporal o de oliva, colocarse unos calcetines de algodón y dormir con ellos.

» Para descansar los pies, introducirlos en una infusión de menta sin filtrar durante 5 minutos.

» Para mantenerlos en forma, sumergirlos de vez en cuando en una infusión de té y manzanilla.

» Si se tienen los pies doloridos:
Meter los pies en un recipiente con agua y un puñado de hojas de árnica. Dejar 15 o 20 minutos. Después darles un masaje con aceite de oliva.

Mantener los pies durante unos minutos en una infusión de romero.

» Para eliminar las células muertas (exfoliar):
Poner los pies en remojo en agua tibia y unas gotas de esencia de naranjo. Frotar luego con piedra pómez, secar bien y aplicar una crema hidratante rica en germen de trigo.
Preparar una pasta con almendras molidas, harina de avena y piel de naranja, masajear con ella los pies, aclarar y secar.

» Para reducir las durezas y combatir grietas frotar diariamente las zonas endurecidas con esencia de manzanilla.

Frotarse los pies diariamente con piedra pómez.

» Para relajar los pies hacer rodar una pelota de tenis con ellos, poco a poco se irá notando una sensación que conducirá a una beneficiosa relajación interior.

» Para aliviar los pies hinchados introducirlos en agua con un poco de melisa. También se puede utilizar arcilla verde, en polvo o pasta.

» Si se tienen las plantas de los pies y los talones muy resecos, frotarlos con vaselina antes de irse a acostar y colocarse unos calcetines de algodón mientras se duerme.

»Un masaje con una crema hidratante después del baño de pies, es calmante y drenante.

» Andar con los pies desnudos sobre la arena, por el agua o el césped descansa las articulaciones.

»Para mantener los huesos sanos es necesaria la vitamina D. Tomar baños de sol ya es una fuente de esta vitamina.

ACUDIR AL PODÓLOGO ANTE CUALQUIER PROBLEMA.

Pies hinchados

La causa puede ser el excesivo calor y un calzado demasiado cerrado, por eso en verano lo mejor es llevar sandalias y que los pies respiren.

» Hacer un baño de pies cada noche, con agua tibia.

» Son muy recomendables los baños alternos de agua fría y caliente; su acción relaja, deshincha y estimula la circulación sanguínea.

» Bañarlos con agua y sal.

» Friccionarlos con alcohol alcanforado después del baño.

» Para aliviar los pies hinchados introducirlos en agua con un poco de melisa. También se puede utilizar arcilla verde, en polvo o pasta.
Pies ágiles
No olvidemos que los pies soportan el peso de todo el cuerpo, lo que obliga a cuidarlos de manera especial. Para que no lleguen a hincharse y por lo tanto poder prevenir la aparición de las temidas varices, realizar este ejercicio con frecuencia:

» Recta, con los brazos pegados al cuerpo, estirar la pierna derecha en el aire y describir pequeños círculos sólo con el pie sin mover la pierna. Repetirlo 15 veces en cada sentido y cambiar de pierna.
Pies sudorosos

»Usar productos especiales contra la sudoración.

»Secar bien los pies después de su lavado.

»Utilizar calcetines de fibra natural.

»Bañarse los pies con una infusión de lavanda y salvia.